Niña karateka salva a su madre de un drogo

Rebecca Kelly, de 13 años, aprendió muy bien las ancestrales enseñanzas del Profesor Miyagi, sobre todo porque se pasó el último verano dando y puliendo cera al coche de su padre. La karateka de cinturón marrón salvó a su familia cuando un yonqui -que portaba una pistola Taser intentó sacar a su madre a rastras del coche para robarla. En el interior del vehículo iban Kelly y su padre, que estaba ultra borracho tirado en el asiento de atras.

Ante la incompetencia del varón de la familia, Kelly decidió poner en práctica todos los movimientos aprendidos en clase y darle una lección al ladrón que nunca olvidaría. Cuando el yonqui estaba arrastrando de los pelos a la madre, Kelly le lanzó una patada voladora a lo Ranger de Texas tirando de boca al pobre asaltante.

No contenta con eso fue a llamar a tres amigos de la escuela de karate para hacer un ejercicio práctico. Cuando los cuatro pequeños kamikazes llegaron al lugar de los hechos no dudaron en iniciar una dolorosa ofensiva contra el yonqui, que ahora sólo pensaba en huir de ese infierno. Finalmente, el golpe del dragón lanzado por Kelly hacia los genitales de su rival puso fin al combate.
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